Una colisión de frente entre dos autos en una vía pública suele tener consecuencias mortales. Si alguna víctima ha tenido la suerte de sobrevivir a una colisión de esta clase, lo más probable es haya resultado con lesiones bastante graves, incluso hasta catastróficas, que la deben mantenerla en un estado de impotencia emocional y física, y un dolor profundo, así como la preocupación respecto al futuro financiero que le espera. Por eso, las leyes establecen el principio de que todo individuo que resulta dañado por causa de las actividades o conductas realizadas por otro, tiene el derecho a ser compensado por sus pérdidas, que pueden ser económicas y no económicas, por medio de los que se conoce como daños compensatorios.

¿A quién puedo acudir para solicitar ayuda legal en caso de haber sido víctima de una colisión frontal entre autos?

Si usted en la actualidad se está tratando de recuperar de un incidente de esta naturaleza en San Diego CA, probablemente no sólo esté sintiendo mucho sufrimiento, sino que además sienta una gran incertidumbre con relación a la situación en la que va a quedar su estado de salud, cuánto tiempo va a tardar en recuperarse, si podrá recuperarse totalmente y, en particular, como va a quedar su situación financiera, así como los pasos que se deben dar para reclamar la compensación legal a la que tiene derecho. Pero, estando en proceso de recuperación, enfrentarse a la situación de tener que luchar con el responsable o con su empresa aseguradora puede resultar una tarea que exceda a sus fuerzas, por lo complicados que estos procedimientos pueden volverse y por la cantidad de diligencias que deben efectuarse, así como la labor de reunir todas las evidencias que demuestren la responsabilidad del culpable del incidente que provocó sus lesiones físicas, de las cuales es probable que le queden secuelas para toda la vida. Por todos estos motivos, lo más saludable desde el punto de vista emocional es contratar a abogados que sean expertos en este tipo de reclamaciones, porque ellos no se desalentarán al llevar a cabo estos procedimientos en beneficio de sus clientes, ya que conocen todas las tácticas que emplean las aseguradoras para que usted se frustre, se desanime y desista de su reclamación. Y la mejor opción está con los profesionales de San Diego Personal Injury Law Firm, quienes tienen amplia experiencia en estos casos y le ayudarán en cada etapa de los procesos, en la recopilación de las evidencias y en la fundamentación legal de su legítima reclamación. Debido a esto, lo que usted debe hacer es ponerse en comunicación con nuestras oficinas, para que empecemos a construir su reclamación con nuestros expertos profesionales.

¿Qué es una colisión frontal?

Tal como la forma de llamarla lo indica, un choque frontal es aquel que tiene lugar cuando dos vehículos impactan entre sí por sus extremos delanteros. Una manera en que esta clase de choques ocurre es cuando un automóvil salta de forma inadvertida la línea que divide las vías en direcciones contrarias e impacta con un auto que se acerca en dirección contraria, cuando un automovilista de forma involuntaria o intencional se desplaza de manera contraria en una autopista o carretera.

¿De quién es la responsabilidad en esta clase de colisiones?

En este caso, la definición es más sencilla que la demostración, porque resulta responsable de esta clase de colisiones el automovilista que lo causó, o cuya conducta favoreció que el incidente ocurriera.

Demostrarlo es algo un poco más complicado, pero para eso están las leyes, y se asume que un automovilista es culpable de un choque frontal cuando el impacto se produjo por causa de que estaba manejando de manera negligente. Ahora bien, se considera que un automovilista es negligente cuando conduce sin tener el debido cuidado razonable que debería tener un conductor normal en una situación similar.

Como ejemplos de manejo negligente que podría ocasionar una colisión frontal entre automóviles en California, se pueden mencionar:

  • Un automovilista se pasó la línea divisoria central en vías públicas con dos carriles en direcciones contrarias.
  • Un automovilista conduce en dirección contraria
  • Un automovilista manejaba en sentido opuesto al tránsito, o que se desplazaba por el lado equivocado de la vía pública.
  • Un automovilista realizó una vuelta en U, algo que está prohibido por las normas de tráfico.
  • Un automovilista hizo un giro de frente al tránsito que se desplazaba en el sentido inverso sin haber cedido el paso.
  • Un automovilista conducía un auto que no era seguro.
  • Un automovilista manejaba bajo los efectos de bebidas alcohólicas.
  • Un automovilista manejaba de manera distraída.
  • Un automovilista incumplió las normas de tráfico, al manejar a exceso de velocidad, no se detuvo en una señal de pare, no cedió a otros el paso o ignoró la señal roja de un semáforo.

No se debe dejar de lado el escenario en el que un choque de frente haya sido producto de un desperfecto o del mal funcionamiento del auto, o por una causa o evento médico. Pero una gran porción de esta clase de incidentes de tránsito son producto de una conducción negligente grave, como cuando se maneja del lado incorrecto de la vía o un automovilista se desplaza en dirección contraria en las rampas de salida o de entrada de una vía pública.

Cuando un automovilista incumple con las normas de tráfico, estará manejando de forma imprudente, poniendo el riesgo la seguridad y la salud de otros usuarios de la vía pública, de modo que podrá ser el culpable del incidente vehicular que produce daños graves materiales, físicos y hasta el fallecimiento de algún individuo. Para poder establecer si un automovilista condujo su auto de manera negligente, el jurado o el juez van a examinar todas las circunstancias que rodearon el incidente.

¿Cuáles son las lesiones que podrían producirse por causa de un choque frontal entre dos vehículos?

Un choque frontal, al contrario de un choque trasero, está calificado como uno de los incidentes viales que son más dañinos y peligrosos de las vías públicas de California. La razón de ello es que son incidentes que pueden provocar lesiones más serias o más graves, y si tienen lugar a grandes velocidades, estas lesiones pueden llegar a ser permanentes e incluso fatales, porque no es posible evitarlas. Hay que pensar que cuando un auto impacta de frente contra otro, la energía que dicho impacto libera se transfiere y se multiplica por causa de la inercia que se produce, como consecuencia del parón intempestivo del desplazamiento al momento del choque, por lo que un individuo posiblemente podrá atravesar el parabrisas, saliendo expelido del interior de su vehículo, sufriendo lesiones de mayor gravedad. En estos escenarios, salvo que todavía se tenga tiempo para realizar las maniobras convenientes para evitar la colisión, la seguridad y la vida de un automovilista va a depender de las medidas de las que disponga en el interior de su auto, como el sistema de cierre de las puertas, la sujeción que ofrezca el cinturón de seguridad o el airbag del auto.

Las clases de lesiones que se producen como consecuencia de un choque frontal entre dos autos, pueden ser:

  • Conmoción cerebral

En un choque frontal lo normal es que la cabeza de los automovilistas impacte contra su volante y la consecuencia posible de ello es que se fracture el cráneo de las víctimas, causando además conmociones cerebrales. Estas pueden producir efectos insospechados, de los cuales es posible que en algunas ocasiones la víctima pueda recuperarse, pero en otras es probable que no.

  • Fracturas de huesos

Por lo general, la sección del cuerpo de la víctima que suele sufrir más con esta clase de impactos es el rostro. Existen casos en los que el impacto del incidente es tan fuerte que incluso con un airbag, es posible que el automovilista sufra de daños faciales. Es posible que el rostro o sus estructuras internas óseas sufran de aplastamientos, produciendo graves lesiones de mandíbula, de las cuencas oculares, las mejillas o la barbilla. Este clase de lesiones no solo requieren de sanación de los huesos fracturados, sino que es posible que la víctima necesite de una o de varias cirugías plásticas.

  • Traumatismos cervicales

Al momento en que ocurre un choque frontal, tanto la cabeza como el cuello de la víctima sigan moviéndose hacia atrás y hacia adelante, aunque el resto de su cuerpo se encuentre sujeto en su sitio, en particular porque tenía colocado su cinturón. Ese movimiento inesperado del cuello y la cabeza puede provocar que los ligamentos y músculos situados en el cuello y la espalda sufran de un estiramiento. Dependiendo de la fuerza del impacto, es posible que el cuello y los hombros de la víctima se estiren o se distiendan aún más de su posibilidad normal de estiramiento. Cuando esto ocurre, los ligamentos, los músculos y los tendones se estirarán o se desgarrarán. Esta clase de lesiones son muy difíciles de curar, por el tiempo que se necesita para ello, y todos los procedimientos que se requieren, y dentro de ese período la víctima puede experimentar serios dolores en la espalda, los hombros, el cuello o la cabeza, entumecimiento, debilidad, visión borrosa o mareos. Todo esto requerirá que la víctima necesite de un tratamiento médico prolongado y especializado, para poder recuperarse de esta clase de lesiones.

  • Lesión en la espalda o médula espinal

Si el choque fue muy fuerte, puede ocurrir que los discos o vértebras que recubren la médula de la espina pasen por el riesgo de comprimirse, o es posible que se facturen o se astillen. Una lesión de este tipo puede provocar una parálisis, dejando a la víctima incapacitada, pudiendo perder de forma total o parcial su sensibilidad, quedando afectado su torso, sus piernas o todas sus extremidades, lo que se conoce con los nombres de paraplejia o tetraplejia. Este tipo de lesiones necesitan atenciones médicas especiales inmediatamente.

  • Lesiones traumáticas cerebrales

Conocidas también con el apelativo de TBI, por sus siglas en inglés, se producen cuando un auto impacta contra otro y la cabeza del automovilista correrá el riesgo de golpearse con su volante. En estos escenarios, el cráneo de la víctima podría fracturarse por causa de la inercia del choque, produciendo lesiones traumáticas en su cerebro. Hay que tener en cuenta que las fracturas de cráneo producen graves daños al cerebro, lo que es muy frecuente en un choque de frente entre autos.

¿Qué se debe demostrar para fundamentar un reclamo como consecuencia de los daños sufridos en un choque de frente?

Con el objetivo de que una reclamación sea válida, se requiere probar que el otro automovilista fue el que tuvo la culpa del incidente. En este escenario, las normas consideran que un automovilista es culpable si: i) no cumplió con el deber de ser cuidadoso al manejar; ii) su negligencia al conducir fue lo que ocasionó el incidente; y finalmente iii) el incidente vehicular fue lo que directamente provocó las lesiones sufridas por la víctima.

Analicemos estos elementos:

  • El automovilista no cumplió con el deber de ser cuidadoso al manejar

Es el primer elemento que debe ser demostrado. Es necesario probar que fue otro automovilista quien tuvo la obligación de ser cuidadoso al manejar, pero, para ello existen las normas de tránsito. De acuerdo con éstas, todos los automovilistas tienen el deber de ser cuidadosos al manejar, y esta conducta se demuestra respetando las normas y las señales de tráfico. Un ejemplo claro sería que un automovilista decida pasarse un semáforo en rojo y chocar frontalmente con otro auto. Aquí resulta evidente que el automovilista incumplió con su deber de ser cuidadoso, al no respetar la señal de pare.

  • Su negligencia al conducir fue lo que ocasionó el incidente

Ignorar un semáforo en rojo es una clara actividad de negligencia al conducir, y hay que probar que dicha negligencia causó el impacto frontal entre dos autos.

  • El incidente vehicular fue lo que directamente provocó las lesiones sufridas por la víctima

Por último, hay que probar que la causa de los daños y lesiones que sufrió la víctima fueron producto del incidente automovilístico. En el caso que hemos tomado como ejemplo, cuando un conductor viola las normas de tráfico al ignorar la señal de pare en rojo, produjo el choque frontal y que la víctima reclamante saliera expelida del interior de su auto y resultara con fracturas de huesos.

¿Qué clases de daños son los que pueden reclamarse después de un choque de frente entre dos autos?

Hay principalmente dos clases de daños que pueden ser reclamados como consecuencia de un choque de frente entre dos autos, que son:

  • Daños económicos

Como su nombre lo indica, son los que se determinan por causa de los que haya tenido que gastar la víctima o sus familiares por daños materiales, cuentas médicas, los salarios que ha dejado de percibir por causa de sus lesiones y la convalecencia necesaria para poder recuperarse de las mismas, la disminución de su capacidad para poder generar ganancias económicas en el futuro, en caso de que la víctima vea disminuida su capacidad de trabajo a como normalmente lo hacía en el tiempo previo a haber sufrido el accidente, las facturas por los medicamentos, los tratamientos, las fisioterapias y los aparatos ortopédicos o implantes óseos que haya necesitado, así como los procedimientos que todavía falten por cumplirse para su total recuperación, o hasta la máxima recuperación que le sea posible, como consecuencia del estado físico en el que lo dejaron las lesiones.

  • Daños no económicos

En este caso nos estamos refiriendo a elementos más complicados de poder expresar en dinero, como los sufrimientos y dolores que soportó la víctima, las pérdidas del consorcio, así como la compensación por una desfiguración o por cicatrices.

Todo individuo que haya resultado víctima de un choque de frente, bien sea un conductor o un pasajero, tiene derecho a exigir una compensación por los daños que hayan sido ocasionados como consecuencia de la conducción negligente del responsable del incidente.

Ahora bien, existe otro tipo de daños que pueden ser reclamados, pero solamente en casos concretos, se trata de lo que se conoce como daños punitivos, o daños ejemplares. Este tipo de compensación no está basada en los daños que el automovilista responsable causó a la víctima o víctimas, sino que tienen su base en las conductas ilegales ejecutadas por el conductor responsable de los mismos. Esta clase de daños pueden reclamarse sólo si es posible comprobar que la conducta desplegada por el responsable fue extremadamente imprudente, o que el choque fue causado de modo intencional.

Lo normal es que las víctimas de esta clase de incidentes vehiculares tengan derecho a reclamar la reparación de los daños sufridos a la empresa aseguradora del automovilista responsable, en vez de demandar directamente a él. Aunque si la reclamación es rechazada por la aseguradora, o si el responsable no tiene un contrato de seguro, tal como exigen las leyes, las víctimas conservan el derecho a presentar su reclamo ante una Corte Civil.

¿Qué sucede si la víctima tuvo también una parte de responsabilidad en la colisión de frente entre dos autos?

Lo que sucede es que conserva su derecho a exigir una indemnización por los daños sufridos, pero sólo en la proporción en la cual el otro conductor tuvo la responsabilidad en el choque de frente. La causa de ello es que en las leyes de California se establece el principio de la culpa comparativa, que establece que si la víctima tuvo alguna cuota de responsabilidad en el incidente, la misma será rebajada de la obligación de indemnización que tiene el otro automovilista.

Si logra determinarse que la víctima tuvo un 15% de responsabilidad en el incidente vehicular, el otro chofer involucrado y culpable estará obligado a indemnizarlo en el 85% del monto de los daños sufridos.

¿Qué es una acción o demanda por una muerte injusta o por negligencia?

Un choque frontal entre dos autos puede tener como desenlace el fallecimiento de uno de los conductores o pasajeros de alguno de los vehículos involucrados, y en estos casos, el cónyuge, la pareja estable registrada legalmente, los hijos biológicos o adoptivos o los hijastros, y en caso de no existir hijos, los parientes que tienen derecho a heredar al fallecido, podrán interponer una acción ante una Corte Civil, en contra del automovilista negligente que ocasionó el choque.

Otro nombre con el que es conocido este tipo de acciones es el de homicidio culposo, e incluye las pérdidas que sufrieron los familiares del fallecido, precisamente por causa de esa muerte. Entre los daños que se pueden reclamar se encuentran los costos por servicios funerarios, entierro o cremación, los ingresos que se pierden en la familia por la muerte de la víctima, así como una indemnización por haber perdido la compañía, el apoyo y el afecto del fallecido.

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El dolor, la angustia y el estrés por el que pasa una víctima de un choque de frente entre autos es bastante grande, y si las lesiones sufridas lo dejan incapacitado de forma permanente o temporal para poder llevar a cabo sus actividades del día a día, esto puede dejarlo totalmente desmoralizado, frustrado y deprimido, a lo que debemos añadir el hecho de que puede haber perdido totalmente su capacidad para producir ganancias económicas y proveer a las necesidades de su familia, sobre todo si tiene hijos. Otro escenario aún más serio es que la víctima haya fallecido en el incidente vehicular, o como consecuencia de las lesiones sufridas en el mismo, porque sus familiares no solo habrán perdido a un ser querido, sino también es posible que hayan perdido una fuente importante de los ingresos económicos que eran proveídos por la víctima, y de acuerdo con las leyes, en cualquiera de los dos casos, los interesados tienen derecho a exigir de parte del responsable del choque de frente las compensaciones económicas a que haya lugar. Pero esto supone llevar a cabo un procedimiento que es mejor dejar que sea seguido por abogados especializados, quienes saben los pasos que se deben dar en beneficio de las víctimas, y entre los mejores se encuentran los que laboran en San Diego Personal Injury Law Firm. Deje que nuestros abogados se preocupen por usted en llevar adelante todos los procedimientos que sean necesarios.

¡Su única preocupación debe ser recuperarse de sus lesiones y del dolor sufrido! Deje que verdaderos profesionales se encarguen de hacer el reclamo correspondiente. Contacte con nuestras oficinas por el 619-478-4059, y con mucho gusto le informaremos sobre lo que establecen las leyes al respecto y sobre lo que tiene derecho a reclamar al responsable.