Los cinturones de seguridad son fundamentales para los pasajeros y conductores de los vehículos, ya que los mantienen sentados en una posición segura por si ocurre un accidente. Debido a que el agraviado puede sufrir consecuencias graves como consecuencia de defectos que afectan el correcto funcionamiento de un cinturón de seguridad, incluyendo daños físicos significativos y pérdidas económicas, tiene derecho a ser indemnizado por los daños y perjuicios que deriven de este hecho.

Este resarcimiento tiene la finalidad de que retome el estilo de vida saludable que tenía antes de la ocurrencia del accidente, y para que sea concedido, se requiere que haya pensado genuinamente, que el cinturón de su vehículo estaba en buen estado, y lo protegería en el supuesto de que ocurriera un accidente.

San Diego Personal Injury Law Firm está conformado por abogados que se dedican a ayudar a sus clientes a ser indemnizados por cualquier daño personal, los cuales tienen una experiencia considerable en los juicios de esta naturaleza y en el procedimiento de la reclamación del pago del seguro. Por lo que podemos ofrecerle la asesoría legal y representación que necesita para que logre obtener el resarcimiento que merece.

¿En qué consiste el fallo del cinturón de seguridad?

Los cinturones de seguridad deben tener equipos resistentes y de alta calidad que sean capaces de soportar el peso de los pasajeros para protegerlos de cualquier impacto. Este diseño fue desarrollado con el tiempo debido a que los fabricantes consideraron necesario brindar una mayor protección. En este sentido, el primer diseño de cinturón de seguridad únicamente aseguraba el cuerpo del pasajero en la cintura, y aunque era una buena medida de seguridad, no era muy útil debido a que los pasajeros aún podían inclinarse hacia delante y golpear las superficies duras del vehículo con el impacto.

Posteriormente, este diseño fue mejorado e incorporó un cinturón de mayor tamaño que cubría todo el torso, lo cual elevó los estándares de la seguridad de los vehículos, ya que estos ofrecían la protección necesaria a los conductores y los pasajeros cuando se producía un accidente automovilístico de alto impacto y eran impulsados hacia delante.

Cuando estos cinturones no desempeñan su función de manera óptima, esto puede provocarle lesiones graves si sufre un accidente debido a que su cuerpo se encuentra sometido a una fuerza significativa e inesperada. Las consecuencias de este tipo de accidentes pueden ser menores o graves, ya que su gravedad depende de las circunstancias que lo causaron y el nivel de fuerza ejercida sobre la víctima del suceso.

Debido a las implicaciones de esta falla, se ha considerado de gran importancia regular los cinturones de seguridad, con la finalidad de que existan estándares de seguridad altos para los conductores. Cuando los conductores o pasajeros no usan sus cinturones en la vía, se les impone una multa de $20 si es la primera vez, o de $50 si ha cometido esta infracción más de una vez.

Los cinturones de seguridad deben tener broches bien fijados y correctamente encajados, además de sistemas de montaje que mantengan al pasajero en la posición correcta cuando se produzca el impacto de un accidente automovilístico, para así cumplir con el propósito de su diseño. Por lo tanto, un fallo en el cinturón puede deberse a una serie de defectos en el sistema de fijación del vehículo. Algunos de estos defectos pueden provocar que la víctima sufra lesiones graves, mientras que otros no son graves y la víctima no sufre un daño corporal significativo cuando se produce el accidente, ya que sigue estando sostenido por el cinturón de seguridad de forma segura.

A continuación, conoceremos algunos defectos que pueden presentar los cinturones de seguridad.

  • Barra de torsión ineficiente. Una barra de torsión es una pieza mecánica de los automóviles que está incluida en el sistema de suspensión, la cual sostiene el cinturón de seguridad y permite que este se despliegue cuando el pasajero lo hala para colocarse el cinturón. Este debe estar fijado adecuadamente en el asiento para permitir que el pasajero esté en una posición firme en todo momento. Por lo cual, un defecto en los mecanismos de esta barra puede provocar que el cinturón se suelte más de lo que debería y de lo que el pasajero necesita. Si esto ocurre, será inefectivo ya que no asegurará al pasajero al asiento firmemente.

Una barra de torsión también puede estar defectuosa cuando se queda atorada constantemente. Si el rodillo de la correa no se mueve, la persona que lo intenta desplegar no podrá extenderlo hasta un largo razonable que le permita cubrir la totalidad de su pecho y torso, y conectar el pestillo al sujetador.

Si el cinturón de seguridad tiene este defecto, no será útil para el conductor o el pasajero del vehículo ya que no podrá usar la totalidad del mismo, quedando expuesto al riesgo de sufrir lesiones por el impacto si se produce un accidente automovilístico.

  • Desenganche provocado por la fuerza. En algunas ocasiones, cuando un vehículo golpea a otro o se vuelca, puede someterse a una fuerza proveniente de distintas direcciones. Si esta es significativa, es posible que el cinturón de seguridad se desabroche solo si está defectuoso y se desprenda del broche. Si esto ocurre, no le brindará al pasajero la protección debida, y este será empujado fuertemente hacia atrás con el impacto de la colisión.

Además, sin el cinturón la víctima no podrá permanecer en posición y golpeará objetos rígidos o piezas internas del vehículo. También es posible que golpee su cráneo con las ventanas de los vehículos, lo cual le puede provocar una hemorragia y otras lesiones graves.

  • Materiales de baja calidad. Algunos fabricantes de vehículos utilizan los materiales más económicos en la producción de cinturones de seguridad, por considerar que es una estrategia rentable, poniendo a los pasajeros y a los conductores que compran estos vehículos en riesgo. Debido a que este material eventualmente se deteriora y debilita, el cinturón empieza a presentar defectos y puede rasgarse, poniéndolos en riesgo de sufrir lesiones en el supuesto de que se produzca un accidente.

Si el cinturón de seguridad está roto, es posible que el pasajero se confíe y lo continúe usando con la esperanza de que lo asegure al asiento cuando se produzca el impacto. Además, el proceso de deterioro del cinturón es lento, por lo que es posible que se rompa cuando menos lo espere, dejándolo desprotegido.

  • Enganche inadecuado. Cuando un pasajero se coloca el cinturón de seguridad estando apurado, es posible que piense que el pestillo está ajustado y seguro en el sujetador, cuando en realidad no lo está. Esta falla ocurre cuando ambas trabas no encajan por ser similares, o el pasajero no encaja el broche correctamente.

En tal caso, cuando ocurre el accidente y la víctima experimenta un golpe contundente, el enganche se desprende, haciendo que el cinturón regrese a la barra de torsión y exponiendo a la víctima al riesgo de golpear el parabrisas o alguna parte rígida del vehículo debido al impacto.

Los accidentes que derivan de estos sucesos pueden ser graves debido a que las víctimas no esperan que el cinturón de seguridad se desabroche, lo cual puede conducir a que no sean capaces de reaccionar o sostenerse a algo oportunamente para evitar sufrir lesiones graves.

  • Defectos del retractor. El retractor es un dispositivo que debe sostener el cinturón en una posición firme y evitar que se extienda cuando la víctima se inclina hacia delante debido a la fuerza externa. Este es un componente fundamental para que el cinturón sea seguro ya que evita que la víctima se mueva y se golpee con el parabrisas o una superficie dura.

Si el retractor está defectuoso, permitirá que el cinturón siga extendiéndose, y por lo tanto no evitará que el pasajero sufra el fuerte impacto. Otro defecto que afecta el retractor es cuando impide que el rodillo de la correa gire, evitando que el pasajero use el cinturón y lo asegure al broche. Si el retractor está demasiado ajustado y no permite que el cinturón funcione correctamente, no le proporcionará la protección necesaria al pasajero y éste quedará expuesto al impacto si ocurre un accidente.

  • Fijación incorrecta del sistema de cinturones de seguridad. Los vehículos que tienen una capacidad adicional para sentarse en el maletero abierto deben tener estructuras de cinturones de seguridad adicionales para sostener los asientos improvisados que suelen ser plegables. Aunque los fabricantes de vehículos se han esforzado en proporcionar cinturones de seguridad para los asientos extras, en algunos casos los instalan en la pared del vehículo en vez de colocarlos dentro del sistema de asientos.

Colocarlos en la pared crea un eje de simetría inadecuado, el cual puede obligar al pasajero que ocupa tal asiento a tener el cinturón muy cerca del cuello. Esta posición no solamente es incómoda, sino que también es peligrosa, ya que, en el supuesto de que el vehículo tenga movimientos repentinos, es posible que el cinturón ahorque al pasajero, provocándole más daño que si no lo hubiese utilizado. Además, la incorrecta fijación del sistema de los cinturones de seguridad, impide sostener a la víctima oportunamente debido a que su cuerpo no está alineado correctamente con el cinturón, provocándole lesiones graves.

Sin embargo, no por esto debe dejar de utilizarlo, ya que debe ser cuidadoso y revisar que se encuentre fijado en la posición correcta para evitar cualquier inconveniente.

¿Qué tipo de lesiones pueden derivar de los accidentes de esta naturaleza?

Aunque algunos pasajeros no resultan heridos en el accidente, en la mayoría de los casos sufren lesiones graves cuando el cinturón de seguridad no funciona correctamente. Estas lesiones tienen diversas causas, y existen varios factores que inciden. Por ejemplo, si un cinturón de seguridad se abre debido a que el broche está defectuoso, liberará al pasajero del asiento, y es posible que este golpee el parabrisas, con lo cual puede romper el vidrio del mismo y ser expulsado del vehículo. Esto ocurre con frecuencia cuando ocurren vuelcos y colisiones frontales.

Algunas de las lesiones que pueden sufrir las víctimas de estos accidentes, son las siguientes:

  • Hemorragia interna. Aunque la víctima no vea heridas en su cuerpo luego del accidente, es posible que haya sufrido una hemorragia interna si se golpeó fuertemente con algún objeto del vehículo. Este daño se produce cuando los vasos sanguíneos o los órganos internos se rompen, lo cual puede causar una serie de consecuencias, especialmente cuando no se detecta a tiempo. Asimismo, el sangramiento suele causar coágulos de sangre graves que pueden provocar infartos u otras afecciones que conducen a la muerte del paciente. Es por esto que, si sufre un alto impacto, debe visitar al médico para que este pueda descartar una hemorragia interna.
  • Latigazo cervical. También conocido como esguince o distensión de cuello, es una lesión que se produce al mover el cuello drásticamente hacia delante y hacia atrás. Aunque la recuperación puede durar un par de semanas, es posible que se prolongue si el paciente experimenta dolor crónico. Por lo cual, se recomienda buscar atención médica inmediatamente después del accidente, con el fin de evitar que los síntomas se agraven más adelante.
  • Fracturas. Generalmente ocurren al romperse un hueso. En los casos graves, el hueso perfora la piel, provocando una fractura compleja. Los síntomas de esta lesión incluyen dolor intenso, deformidad, entumecimiento, y limitación del movimiento. Si sospecha haberse fracturado, es fundamental que sea atendido por un médico lo antes posible, el cual ordenará una radiografía para determinar si el hueso está roto. En los casos de fracturas graves, en algunas ocasiones el paciente necesita cirugía.
  • Lesiones cerebrales traumáticas. Ocurren como resultado de un golpe fuerte en la cabeza. Generalmente, son causadas cuando un objeto penetra el tejido cerebral. Esta lesión varía de leve a grave y causa una serie de daños al cerebro, pudiendo provocar complicaciones a largo plazo o la muerte del paciente. Las personas que sufren esta lesión deben recibir cuidados médicos de emergencia y someterse a un tratamiento extenso.
  • Lesiones de la médula Cuando el cinturón de seguridad no cumple con sostener el cuerpo de la víctima y mantenerlo en su lugar, es posible que el impacto repentino provoque daños graves a la médula espinal. Por medio de esta los nervios esenciales transmiten señales al resto del cuerpo, por lo que cumple un papel fundamental en el funcionamiento correcto del organismo y una lesión de la misma puede acarrear consecuencias graves.

Una de las afecciones más graves que pueden surgir como consecuencia de una lesión de la médula espinal es la parálisis. Debido a la importancia de la columna vertebral, cualquier daño corporal o desalineación puede afectar otras partes del cuerpo, especialmente las extremidades. En otros casos, la parálisis se produce como consecuencia del daño de los nervios que están alojados en la columna vertebral, los cuales cumplen una función sensorial, de manera que pueden provocar una pérdida de la sensibilidad en partes específicas del cuerpo, cambiando drásticamente la vida de los afectados.

  • Sufrimiento y dolor. También puede reclamar el resarcimiento de cualquier incomodidad o dolor, ya sea psicológico o físico, que le haya causado el accidente, pudiendo tratarse de trauma, depresión, estrés, ansiedad, dolor emocional, o trauma.
  • Pérdida del consorcio. Se les otorga a los parientes de un fallecido como consecuencia del accidente, por la pérdida de la compañía física, afecto, sustento y cuidado de este, además del dolor emocional derivado de esta pérdida.
  • Pérdida del disfrute de la vida. Las lesiones pueden complicar su vida y por lo tanto no podrá disfrutarla como solía hacerlo, impidiendo que realice muchas de las actividades de la vida diaria o practique su pasatiempo favorito, por lo que está facultado para recibir un resarcimiento por tal daño, además de cualquier inconveniente derivado de las lesiones. Por ejemplo, si sufrió una lesión en la médula espinal que le produjo parálisis, y por lo tanto debe usar una silla de ruedas y depender de otras personas para realizar las mismas actividades que solía hacer solo, este inconveniente debe indemnizarse.

¿Quién es el responsable de estos accidentes?

Generalmente, cuando el cinturón de seguridad tiene defectos, la responsabilidad es de los fabricantes, debido a que su obligación principal es cerciorarse de que el vehículo se encuentre en buen estado en su totalidad, incluyendo el sistema de cinturones de seguridad. Además, deben asegurarse de que la calidad de los materiales utilizados en la fabricación del vehículo sea óptima, para evitar el rápido deterioro de las piezas.

Por lo tanto, los fabricantes son los principales responsables de la producción ineficiente de cinturones de seguridad. Algunos motivos por los cuales estos pueden tener una calidad inferior, son los siguientes:

  • Elección de materiales baratos. Cuando los fabricantes no cumplen con los requisitos establecidos para la producción de los cinturones de seguridad, exponen a los conductores de tales vehículos a un riesgo considerable, ya que los materiales de mala calidad hacen que el cinturón o los componentes esenciales del mismo se deterioren fácilmente. Si estos fallan, colocan al pasajero ante un riesgo inminente en el supuesto de que se produzca un accidente.
  • Probar el producto final utilizando estándares deficientes. Una vez que se complete la fabricación del producto, este debe someterse a un control de calidad. Asimismo, los fabricantes desempeñan un rol importante en asegurarse de contratar inspectores de calidad profesionales que puedan identificar cualquier problema que presente el producto final antes de que sea lanzado al mercado. Por lo tanto, si los individuos que realizan las pruebas aplican estándares de calidad malos, pueden pasar por alto fallas que constituyen factores de riesgo si se produce un accidente.

¿Por cuáles daños puede ser resarcido tras el accidente?

Las víctimas de los accidentes automovilísticos que sufren lesiones graves como consecuencia de fallas del cinturón de seguridad tienen derecho a reclamar una indemnización por los daños y perjuicios sufridos. Si se determina que usted no contribuyó a que se produjera el accidente, el demandado deberá pagarle la totalidad de los daños. Algunos de estos, son los siguientes:

  • Gastos médicos. Si ha sufrido un accidente de esta naturaleza, debe recibir atención médica de inmediato. Luego de examinarlo, el médico le prescribirá los medicamentos y tratamientos que deberá cumplir. Si ha sufrido una lesión grave, es posible que deba estar hospitalizado por cierto tiempo, o que deba someterse a un tratamiento de fisioterapia continúo para que sus extremidades se recuperen por completo. Debido a los gastos médicos significativos que derivan de ello, el demandado debe pagarle una indemnización, cuyo monto deberá ser suficiente para reembolsarle todos los gastos de medicinas, tratamientos, procedimientos quirúrgicos, suministros médicos, y consultas.
  • Ingresos perdidos. Si sufre lesiones permanentes como parálisis o fracturas irreversibles que le impiden trabajar, el particular o la entidad responsable del fallo del cinturón de seguridad debe resarcirlo por esta pérdida de ingresos. Esta situación es común cuando su trabajo requiere un esfuerzo físico. Por ejemplo, si es un bailarín profesional. Por lo que su abogado de daños personales debe asegurarse de que se realice una correcta estimación de los ingresos futuros para que estos sean cubiertos por la indemnización.
  • Muerte por negligencia. Los accidentes de este tipo pueden acabar con la vida del conductor o los pasajeros del vehículo. En tal caso, los familiares de estos pueden reclamar una indemnización por la pérdida de su ser querido, además de exigir un pago para cubrir los gastos funerarios y la pérdida de los salarios con los cuales el fallecido sustentaba a su familia, especialmente si este era el proveedor principal.

Además de estos pagos, el juez que decida el caso puede obligar al demandado a pagar los daños punitivos, con la finalidad de castigar su actuación y disuadirlo de realizar la misma conducta negligente en el futuro. Debido a que generalmente el demandado es el fabricante del cinturón, con esta medida se fomenta la producción de cinturones de seguridad de mejor calidad.

¿Cómo contactar abogados de daños personales que estén cerca de mí?

Los accidentes automovilísticos pueden cambiar su vida drásticamente, pero exigir la indemnización por su cuenta puede ser estresante y agotador. Por lo que, en nuestro bufete, estaremos felices de prestarle la mejor asesoría y representación para que sea resarcido, mientras se enfoca en retomar su vida y recuperarse de las lesiones o el daño emocional derivado de este suceso.

Si usted o alguien cercano sufre un accidente automovilístico derivado de un fallo del cinturón de seguridad, contacte a San Diego Personal Injury Law Firm, ubicado en San Diego California; llamando al 619-478-4059.